Encantadora casita en Carolina del Sur

Esta casa de aproximadamente 180 m2 situada en Charleston, Carolina del Sur, que fue contruida en el siglo XIX como casa de cocina, es decir, una casita que forma parte de una casa principal, y que se usaba para cocinar y dar servicio a la casa principal.

La casita ha sido adquirida por un padre y su hijo que la reformaron para convertirla en una casa de dos pisos, con la ayuda del estudio de diseño estadounidense Workstead.

En la reforma el equipo ha apostado por dejar a la vista el añoso ladrillo visto, algunos revestimientos como los marcos de las ventanas, o las instalaciones en el techo.

En este espacio de aire brutalista y colonial, muchos muebles principales se han hecho a medida aprovechando los huecos de la casa.

Los armarios de madera recorren gran parte del comedor y aprovechan los huecos de las paredes que generan las chimeneas. Su diseño aprovecha las paredes para convertirse en zona de carga y bajo la ventana, la han continuado para crear una bancada.

En la cocina han apostado por muebles negros mate, de líneas rectas y sobrias con tiradores rectos de la misma madera que los peldaños de la escalera, cuyo vuelo rematan los altos de los armarios.

Parte de las paredes de los dormitorios y las que se han creado nuevas, se han revestido con listones de madera natural. Estas paredes aportar calidez y un aire colonial, acorde a la edad de la casa. Es más; todo el mobiliario como son el sofá, sillas así como los accesorios de grifos y lámparas tienen un aire vintage o "retro" que parece respetar la edad de la casa.

Aunque todos los elementos parecen nuevos, no hay ningún mueble o elemento de diseño moderno que parezca fuera de lugar. Salvo tal vez, los muebles metálicos de la terraza exterior, que no te preparan para interior rotundo y masculino de la casa…