REFORMAR UNA COCINA

Cuando se decide realizar una reforma en la cocina, normalmente se intenta elegir un mobiliario más actual con acabados y colores renovados, distintos a los anteriores que se han tenido y de los cuales uno se ha cansado de ver y utilizar. Resulta interesante barajear diferentes opciones de reparto en los mobiliarios, que resultan atractivos y se van recopilando catálogos y revistas que aportan ideas al futuro proyecto. Aun así, existen varios factores para elegir una cocina. El primero suele ser el colorido y la terminación que más guste instalar, aunque realmente el más importante es una distribución acertada del mobiliario, cómoda para un uso y trabajo diario.

La decisión más comprometida es la repartición de zonas son decisiones que deben realizarse con especialistas en cocinas, los cuales asesoran y reconducen las mejores opciones junto con cada necesidad. Según las medidas de espacio disponible pueden encajar unas distribuciones mejor que otras y ha llegado el momento de inspirarnos con estas disposiciones en cocinas, ver cual se adapta mejor, teniendo en cuenta metros, ventanas, pilares y puertas.

En cocinas de estilos rústicos, clásicos, minimalistas y modernos la perspectiva de instalación mobiliaria puede ser igual, aunque los estilos varíen. Pero ¿Cuáles son estas disposiciones tan demandadas como atractivas? Digamos que actualmente se decora con seis tipos de planteamientos y son estos:

1. COCINAS CON ISLA CENTRAL

Evidentemente se necesitan espacios amplios. Suelen incorporar la zona de agua y cocción conjunta. Desde estas islas se añaden prolongaciones de mesas altas, de la misma o mayor altura que la encimera, son las conocidas barras antiguas, pero mejoradas en diseño y terminación. Quedan integradas en la misma isla, pues parte de ella, y son de gran utilidad para un desayuno en familia, una comida ligera o una clase de cocina con espectadores y ayudantes.

2. COCINAS CON PENÍNSULA

Se pueden crear cocinas con penínsulas también en espacios reducidos. La distribución de península consiste en que una parte del mobiliario y la encimera sobresalen respecto al mobiliario instalado en posición frontal. Estas penínsulas pueden llevar fregadero y placa de inducción instaladas o simplemente ser una encimera.

3. COCINAS LINEALES

Mucho más sencillas son las distribuciones lineales, que realmente no eliminan los espacios intermedios, es cuestión de gustos. Son bastante más prácticas por tener distintos frentes de almacenaje y dan una sensación actual de recogimiento y limpieza exterior, que sólo deja ver la belleza de las terminaciones y pocos electrodomésticos quedan sin camuflar. En este tipo de distribución el triángulo de trabajo desaparece ya que todos los elementos se sitúan en línea.

4. COCINAS EN L

Hace unos años eran las más utilizadas generalmente en habitaciones rectangulares o cuadradas. Es otra opción de disposición y no por ello más anticuada. Para la distribución en L se contemplan muebles colgantes donde el espacio de almacenaje es fundamental. Hoy en día existen puertas abatibles hacia arriba y con mecanismo de frenada y sujeción, lo que se agradece muchísimo en una apertura de este tipo. Las cocinas dispuestas en L le dan continuidad a las encimeras y por tanto se amplía la zona de trabajo resultando bastante cómoda su función.

5. COCINAS CON ZONAS EN PARALELO

Digamos que se dividen en dos particiones, una zona de cocción y otra zona de agua. Es interesante coordinar y enfrentar las zonas al mismo alcance, esto quiere decir en la práctica, que el fregadero suelen instalarse enfrente de la zona de cocción o lo más cercano posible, para hacer un uso cómodo de estos dos elementos que son los más utilizados para cocinar, ya que cambiar de una zona a otra de trabajo implica desplazamientos. Son prácticas en casas donde la cocina tiene puertas enfrentadas a modo de pasillo o donde existe un tránsito considerable.

6. COCINAS DISPUESTAS EN U

Una distribución en forma de U es muy funcional, especialmente cuando existen zonas de trabajo adicionales. Con esta distribución todo queda a mano si la cocina no es excesivamente amplia. Por el contrario, si la forma de U se instala en espacios pequeños dificulta el trabajo es un incoveniente, cuando hay varias personas al mismo tiempo.

Otras elecciones distintas a la distribución son las cajoneras o puertas abatibles, algunas llegan a una apertura de 180º. Ideal esta opción para empotrar una lavadora. Hoy en día se coordinan las dos opciones sin darle importancia a su diferencia. Lo importante para una cocina moderna es el respeto de líneas puras y limpias, una simetría en su mobiliario y medidas similares enmarquen uniformidad. En definitiva, estas son las cinco opciones estructurales más utilizadas para una reforma de cocina.