Reformas fáciles

Las reformas ponen los pelos de punta. Es verdad que cuando la obra está terminada luce muchísimo y en seguida se nos olvida todo lo que hemos pasado, pero pasar por ellas, casi siempre es una tortura. Por suerte, hay muchas cosas que se pueden hacer en un hogar antiguo para renovarlo sin dejarte mucho dinero, ni hacer grandes obras. Reformas fáciles y asequibles con las que dar el cambiazo en tiempo récord y dejar que en nuestra casa se respire ese aroma típico de la primavera.

1. USANDO EL COLOR

La pintura de techos y paredes, es un material económico y fácil de tratar. Si te animas incluso puedes pintar tú mism@. Les aseguramos que no es difícil y que con los años va cogiendo uno más soltura. Si te animas con los contrastes de color, degradados o pintando con distintos motivos geométricos, aún mejor.

Este año la tendencia es el amarillo fuerte (Miniom), los rosas o azules claros, yo creo que al final tu casa te tiene que gustar a ti y combinar bien con lo que tienes, sobre todo si no quieres hacer una gran inversión.

Utiliza la gama cromática que más te guste en tejidos: manteles, plaids, cojines, edredones, colchas, cortinas. Las telas tienen siempre un gran valor decorativo.

2. EL GOTELÉ

Inundaban hace unos pocos años las casas de la inmensa mayoría de nosotros, pero hoy nos repelen.

Hay muchas formas de eliminar fácilmente el gotelé (técnica para pintar paredes que consistente en esparcir sobre ellas unas gotas de pintura espesa que dan al muro un relieve granulado), sin ni siquiera necesitar un especialista.

3. SUELO SOBRE SUELO

Cero obras, cero escombros, cero complicaciones de cabeza. Tenemos suelos laminados, vinílicos, de pega y listo, o incluso de microcemento capaces de darle una imagen totalmente nueva a tu casa, sin complicarte la vida.

4. CAMUFLA CON ALFOMBRAS

Si en tu balanza de prioridades pesan más otras cosas que tu casa, no pasa nada. No te sientas mal por ello, hay que aprende a vivir con lo que se tiene y no lamentarse por ello.

Pero si deseas hacer un cambio por poco dinero puedes poner una alfombra resulta mucho mejor en cuanto a precio que cambiar el suelo por otro nuevo. Flores, grecas o medallones son elementos que no fallan.

Las alfombras de fibra natural son siempre un acierto además sirven no solo en primavera o verano quedan perfectas todo el año.

5. PERSIANAS O CORTINAS NUEVAS

Durante una buena temporada se hacía mucho hincapié en que las persianas eran lo máximo. Y lo son, sobre todo si queremos un cambio radical. Pero una cortina suele vestir más y dar carácter a los espacios más sosos del mundo.

No hace falta que la encargues a medida, compra un modelo ya confeccionado que se ajuste bien al tamaño de tu ventana o balcón y listo. Si arrastra tampoco es problema (salvo si vas a tardar semanas en quitar el polvo porque se acumulará debajo.

En primavera lo ideal son los motivos botánicos o naturales, pero de nuevo, la apuesta depende de las ganas de innovar que tengas.

6. UNA MANO DE PINTURA TAMBIÉN A LAS PUERTAS Y ARMARIOS

Por supuesto, la carpintería de puertas, armarios y ventanas desmerece mucho un hogar si no está en buenas condiciones.

Funciona estupendamente la pintura para muebles de interior. Si no eres muy de hacerlo tú mismo con esto de la brocha los vinilos adhesivos son una opción. Hay opciones bastante interesantes de muchas marcas, que incluso te fabrican el vinilo a la medida del mueble que quieras cubrir en algunos centros de impresión o imprentas dedicadas a esto.

7. CAMBIA TIRADORES

O manillas de las puertas. Pomos y tiradores son elementos por lo general económicos y accesibles para cualquiera.

8. DEJA QUE EL BAÑO VUELVA A LUCIR

Esmérate un poco por mejorar su luz, cambiar las toallas, añadir unas flores, o algunas baldas donde dejar unas cajas de madera con esencias o perfumes.

Si no tienes luz natural, tampoco pasa nada, coloca plantas artificiales (eso sí que no se vean súper falsas).

9. ATENTOS A LA COCINA

Si te das una vuelta por las inmobiliarias suecas, verás que ellos son auténticos especialistas en hacer renacer las cocinas. Simplemente dale una mano de pintura, cambia la encimera. Libérala de trastos y súmale luz.

Unos cestos de fibra por aquí, algunas plantas naturales por allá, una alfombra graciosa junto a la zona de cocción y por supuesto, tu rincón de aromáticas con las que aderezar cualquier plato…