El antes y después de una cocina abierta al salón
No te vas a poder creer el cambio tan espectacular que traigo
hoy, una cocina pequeña oscura, triste y
una salita contigua fría que estaban unidas por una ventana pasa-platos, de esa
que se llevaban hace más de tres décadas, convertidas en un fantástica
cocina-comedor digna de una revista de decoración.
Será que el concepto abierto u open plan cada vez me tiene más
motivada pero el resultado me encanta
Se empezó derribando el muro que dividía ambas estancias para
crear un espacio único. Luego se eliminó el pavimento cerámico de paredes y el suelo
de la cocina junto con la moqueta del suelo del salón. También se eliminaron
los muebles y las terribles cortinas.
Se instaló una tarima flotante en color madera ceniza
que unificará toda la superficie.
En el frontal donde van los muebles de cocina unos azulejos tipo metro y el
resto de paredes se pintaron en un color gris claro.
Una vez tenemos el lienzo preparado comenzaron a colocar los
muebles. Aunque no lo parezca el mobiliario de cocina es lowcost, más en
concreto de IKEA. En lo que si se invirtió dinero es en las placas de mármol
blanco que recubren la encimera y la imponente isla que se ha creado en el
centro, separando la zona de cocina del comedor a la vez que se crea un
práctico desayunador.
Posteriormente se ocuparon de la iluminación; unos focos
halógenos empotrados en el techo para la zona de cocina, unas atractivas
lamparas encima de la isla y el comedor de diferentes estilos para diferenciar
las zonas.
Ahora solo queda el resto de la decoración; cortinas,
alfombras y por supuesto los muebles del comedor y un cómodo banco para
descansar.
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